ANSIEDAD SEXUAL ¿Qué es y cómo gestionarla?

 

En primer lugar, debes saber que, en términos generales, la ansiedad es un mecanismo de defensa que utiliza nuestra mente para alertarnos de que estamos ante un peligro o riesgo real, por lo que cumple una función adaptativa para protegernos de dicha amenaza, bien sea evitando la situación, huyendo de la misma o afrontándola para superarla. Por tanto, se trata de una respuesta innata que tiene como misión la propia supervivencia. Nos ayuda a reaccionar mejor y con más rapidez, haciendo que nuestro organismo se acelere y permitiéndonos ser más eficaces. Sin embargo, puede ocurrir que pase de ser nuestra aliada a ser nuestra peor enemiga; apareciendo ante situaciones que no suponen ninguna amenaza real y presentando toda una serie de sintomatología ansiosa que resulta muy limitante (sudoraciones, taquicardias,respiración acelerada, pensamientos irracionales, etc).

Existen situaciones en las que la ansiedad puede afectar de tal manera, que no le permite a la persona desarrollar una vida satisfactoria y feliz.

Apreciado lector, en este artículo abordaremos un tipo específico de ansiedad, como lo es la ansiedad sexual, buscando responder qué es, causas, cuáles son sus síntomas y cómo puedes controlarla.

Según varios expertos en Sexología, Psicología y sobre todo en Terapia de Pareja, manifiestan que este tipo de ansiedad ocurre debido al propio deseo de agradar y la intención de querer satisfacer las expectativas de la otra persona en el ámbito de la intimidad.

¿Qué es la ansiedad sexual?

La ansiedad sexual es la respuesta que se produce en torno a las relaciones sexuales, puede ser antes o durante el encuentro sexual, lo que te puede impedir disfrutar la sexualidad. De tal modo que, si la ansiedad generalizada es un problema, la ansiedad sexual impide la realización de un área importante en la vida de muchas parejas.

Causas de la ansiedad sexual

Es importante conocer cuáles son las causas de la ansiedad sexual, de esa manera podrás identificar si tus síntomas se han producido a raíz de estas causas:

1. Situaciones de estrés también afectan la sexualidad y provocan ansiedad sexual.

2. Inseguridad y falta de confianza en sí mismo por complejos físicos, por insatisfacción con la apariencia propia, por no estar cómodo con el aspecto de los genitales o del cuerpo en general.

3. Miedo a no cumplir las expectativas de la pareja en el ámbito sexual.

4. Si se ha sufrido o se sufre de disfunción sexual en relaciones anteriores también puede originarse la ansiedad sexual.

5. Otra de las causas puede ser los problemas de pareja, como falta de comunicación o falta de confianza.

6. Problemas emocionales también producen ansiedad sexual, no saber gestionar las emociones.

Síntomas de la ansiedad sexual

Los síntomas de este tipo de ansiedad se pueden presentar con más frecuencia cuando apenas se va conociendo a la pareja sexual, sin embargo, también puede ocurrir después de semanas, meses, incluso años de relación.

Los síntomas que debemos tener en cuenta pueden ser:

Taquicardia, Mareos

Problemas para respirar

Mareos, Temblores

Sequedad en la boca, Hormigueo corporal

Sensación de perder el control o irrealidad

Se puede producir dolor abdominal

También se puede presentar inestabilidad

Tensión cervical, entre otros.

Estos síntomas se pueden presentar incluso con solo pensar en mantener relaciones sexuales con una persona.

¿Cómo gestionar la ansiedad sexual?

Para controlar la ansiedad sexual se debe estar consciente del problema y su causa, y así establecer estrategias para afrontar los síntomas.

Existen ocasiones en las que se requiere de medicamento, sin embargo, debe ser un médico especialista quien decida el tratamiento médico.

Por otra parte, el proceso (terapia de pareja) también te ayuda a controlar la ansiedad sexual.

¿Qué hacer?

1. En primer lugar tenemos que hablar con nuestra pareja de ello. Poder comunicarse abiertamente de lo que está pasando es muy liberador para la persona y permite a la pareja entender la situación mucho mejor, y sobre todo buscar soluciones para superarla.

2. Aumentar los momentos de intimidad. Si es por ejemplo el coito lo que nos provoca la ansiedad, podemos buscar otras alternativas para más adelante ir abordando ésta. Podemos darnos masajes eróticos, compartir un baño juntos, etc.

3. Incluir estímulos distractores. Es decir, poner velas con olores agradables, una música suave… Estímulos que nos permitan concentrar en ellos nuestra atención y tratar de desviarla de los pensamientos que nos provocan la ansiedad.

4. Practicar, 'respirar antes de actuar'. La ansiedad genera estrés y una manera de controlarlo es haciendo respiraciones profundas y conscientes, por lo que practicar durante el día este tipo de respiración, nos ayudará a relajarnos en las situaciones estresantes.

5. Ejercitar nuestro cuerpo. Realizar ejercicio diario, aunque sea media hora de paseo, permitirá que nuestro cuerpo esté más activo, fortalecido y que nos sintamos mejor con nosotros mismos a nivel físico y mental, lo que nos dará mayor seguridad en las relaciones sexuales.

6. Pide ayuda psicológica. Si nada de esto funciona, consulta a un profesional especializado en problemas sexuales que pueda ayudarte a conocer tus temores y a entender qué cosas te preocupan o te causan ansiedad, así como también a sentirte más cómodo con tu sexualidad y con tu pareja.

Recibe un abrazo de mi parte.

Psic. Rayan Muepaz

Fundador del Proyecto Nueva Psicología

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