viernes, 5 de junio de 2020

CAPITAL SOCIAL ‘CRECIMIENTO PERSONAL Y COLECTIVO’

En la vida vamos afrontar un sinnúmero de problemas o situaciones adversas que por muy difíciles que parezcan de superar, siempre nos dejarán grandes lecciones y aprendizajes que nos permitirán seguir avanzando hacia la consecución de nuestras metas y objetivos que nos hemos planteado en la vida.

No obstante, la realidad de nuestros días no es nada favorecedora a nivel económico, social y cultural, lo que ocasiona que en su gran mayoría las personas de varios sectores sociales se encuentren sumergidos en la incertidumbre y desesperanza, enfrentando muchos y variados problemas, realmente estamos viviendo épocas oscuras y complejas.

Pese a ello el curso evolutivo de la naturaleza, la sociedad y el pensamiento no se detiene, pues es un proceso progresivo, con zig-zags y retrocesos temporales, pero siempre va hacia adelante y hacia arriba como una espiral dialéctica.

La mayoría de personas creen que la única forma (vía) para afrontar y superar una crisis social, es la de esperar a que todo vuelva hacer ‘normal’, y así poder continuar con la misma rutina ‘Zona de Confort’, ¡ERROR! Hay que cambiar aquella mentalidad y reprogramarse, si lo que quieres es alcanzar la realización personal, forjando ‘Tu Mejor Versión’. ¿Cómo? Dejando de pensar que la crisis es sinónimo de abandonar aquellas metas u objetivos propuestos en la vida, y percibirla como una oportunidad para encontrar nuevas formas para apalancarte y superar cualquier situación adversa.

Una de las formas que nos permite acercarnos hacia la consecución de materializar nuestros sueños a la realidad concreta, es sin duda alguna el Capital Social o Relaciones interpersonales de Gran Valor; es decir, aquellas personas que pueden contribuir en muchas áreas de la vida, buscando tu superación y desarrollo personal, optimizando la capacidad de acción y satisfacción de objetivos y necesidades (obtener empleo, emprender, realizarse profesionalmente, etc.), al mismo tiempo que facilitan el altruismo y la cooperación en beneficio personal y colectivo.

Pero, ¿Qué es el Capital Social?

El principio básico de capital social se viene debatiendo desde la década de los 80, partiendo de diversos estudios sociológicos, inicialmente desarrollados por Pierre Bourdieu y James Coleman, donde se investigaba la influencia del entorno social y cultural sobre el crecimiento personal y profesional en los seres humanos; siendo en la actualidad sujeto de estudio dentro del campo de la psicología, específicamente de la psicología social.

El capital social se mide estrictamente en el acceso que tenemos a personas de gran valor, y como podemos apalancarnos de aquellas relaciones y, por lo tanto, como nos beneficiamos recíprocamente de un conjunto humano (relaciones interpersonales) y aquellos aspectos que permiten evidenciar la cooperación, el altruismo, en función de relaciones sociales constructivas, donde cada individuo pueda ayudar a tejer una red de apoyo (networking humano) que beneficie a una comunidad en concreto.

El capital social es una especie de red de apoyo, donde las acciones de cada individuo inciden directamente en el desarrollo integral del otro, pudiendo limitar o potenciar la satisfacción de aquellas necesidades biológicas, psicológicas y sociales.

Es decir, los seres humanos somos seres gregarios por naturaleza, para satisfacer nuestras necesidades principales (sobrevivencia, reproducción y espiritualidad) requerimos tejer lazos con otras personas, convivir en grupos y comunidades.

Elementos que interactúan en el capital social:

Familia. - sin duda alguna la familia es nuestro primer círculo social, son aquellas personas con las que aprendemos a relacionarnos y las cuales nos proporcionan las bases necesarias para afrontar la vida; no obstante, la familia no siempre puede ser considerada como capital social dado a que muchas de las creencias que poseen acerca de la vida, el mundo y la sociedad, no siempre suelen ser compartidas, y con ello subconscientemente nos limitan a lograr alcanzar nuestro desarrollo integral, pues como bien sabemos cada persona quiere seguir su rumbo, su propio camino, a pesar de las dificultades y la adversidad.

Pareja. – las relación de pareja es una de las bases mas importantes sobre la cual se asienta el capital social, puesto que el compartir e interactuar con la pareja permite satisfacer aquellas necesidades biológicas, psicológicas y sociales, mediante acciones que propicien la superación y el crecimiento en su conjunto, ya sea de forma individual y al mismo tiempo en pareja.

No obstante, la elección de la pareja debe ir siempre encaminada a un tipo de relación constructiva, donde sus miembros posean cualidades personales de mejora constante: 

Valor personal o autoestima, 
Emociones funcionales, 
Pensamientos congruentes, 
Creencias potenciadoras, 
Conductas asertivas y 
Proyectos de vida en común

Es decir, personas que pongan de manifiesto su máximo potencial en pro de sumar y aportar valor concreto a la relación.

Círculo social. - las relaciones interpersonales resultan ser un empuje decisivo para la actividad productiva, la satisfacción de las necesidades humanas y el desarrollo social; es decir, tanto como la elección de la pareja, colegas profesionales, amigos y conocidos, deben ser personas de valores, costumbres y perspectivas democráticas, progresistas y científicas; específicamente aquellos individuos que aporten algo concreto a tu vida, en un intercambio de valor social, estas personas deben poseer un grado alto de pasión y vocación ‘Valor Personal’ en lo que realicen, apegados a la ciencias humanísticas, artísticas y culturales, básicamente relacionarse con personas que su principal objetivo en la vida sea ‘Construir su Mejor Versión’.

Características personales que debemos buscar en el capital social:

-Personas que poseen una‘filosofía’ en la que basan su estilo de vida.
-Personas que le hacen frente a retos y desafíos que obstaculizan su progreso.
-Personas que gestionan sus emociones y son estrategas ante la adversidad.
-Personas que poseen estilos de vida pro-activos y constructivos.
-Personas que poseen sentimientos de empatía, equilibrio, altruismo y transformación.
-Personas predispuestas hacia nuevas experiencias que conlleven nuevos aprendizajes.
-Personas comprometidos en forjar valor personal y en colectivo.

Esto no significa que debamos rodearnos de personas que sean una completa ‘lumbrera’ ¡NO!, pero sí que aporten valor real y concreto (aprendizajes valiosos) a nuestras vidas.

Conclusión

Definitivamente las interacción con nuestro circulo social influye en más de 50% en la construcción de nuestra personalidad y con ello en la acciones y decisiones (conducta) que ejecutamos en el día a día, es por esto que tu eres el reflejo de las personas con las que interactúas y compartes durante el transcurso la vida.

El refrán "dime con quién andas, y te diré quién eres", hace referencia a que en lo posible debemos rodearnos de personas valiosas 'de gran valor', que nos permitan conocer nuestra realidad (debilidades y límites), y a su vez nos contribuyan a transformarla (fortalezas y oportunidades) para superarnos profesional y socialmente. (no se trata de ser personas narcisistas o ególatras, pero si de diferenciar aquellos que nos aportan o apartan de nuestra 'Mejor Versión') 

Para vivir una vida llena de aprendizajes, alegrías, aciertos, propósitos, esperanza, cooperación y sobre todo el progresar como individuos y como sociedad, necesariamente debemos dedicarnos en construir un mundo nuevo, para ti y tu gente, experimentando grandes momentos de éxtasis cognitivo/ emocional, amistades, amores y reconocimiento social.

Rayan Muepaz
Psicólogo y Escritor
Contactos:

capital social



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